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¿Cómo se trata la Osteoartritis?

Tratamiento en equipo

14 de enero de 2020

La osteoartritis, también conocida como artrosis, es una de las enfermedades articulares más frecuentes. Esta afecta alrededor de 302 millones de personas a nivel mundial y se vuelve más frecuente con el envejecimiento de la población. No existe ningún medicamento que frene su progresión ni que la cure. Afecta de forma más frecuente rodillas, caderas y manos, y es la principal causa de discapacidad en adultos. Por lo anterior es fundamental la prevención y, si aparece, un manejo comprensivo para obtener los mejores resultados.

En cuanto a prevención las medidas más eficaces son evitar el sobrepeso, buen estado físico y evitar lesiones articulares. La osteoartritis no es una enfermedad mortal, pero al comprometer todas las estructuras articulares se asocia a dolor e incomodidad que pueden llevar a un deterioro importante de calidad de vida y funcionalidad en quienes las sufren. De allí la importancia de un estilo de vida saludable que disminuya la probabilidad de sufrirla.

Una vez aparece la osteoartritis se deben realizar cambios en estilo de vida para obtener los mejores resultados. Si hay sobrepeso u obesidad, una disminución de al menos un 5% del peso corporal brinda mejoría en el dolor, y este beneficio aumenta de forma progresiva hasta disminuciones de un 20% (si están indicadas clínicamente). Siempre se debe realizar actividad física según las posibilidades de acceso y físicas de cada paciente, utilizando el sentido común e idealmente de una forma dirigida y supervisada (ya sea individual o en grupos). Las rodilleras para la artrosis de rodillas y el uso de bastones para la artrosis de rodillas y caderas se pueden considerar si hay alteraciones en el equilibrio o en la deambulación. El Tai chi y el yoga, ambos bajo supervisión, podrían tener utilidad para el manejo del dolor. El uso de calor o frio, aunque tiene poca evidencia, es una intervención de bajo costo que se puede utilizar si se siente mejoría.

En conjunto con estas medidas, existen intervenciones con medicamentos que pueden mejorar el dolor. Los antinflamatorios aplicados de forma tópica en los sitios de dolor, sobre todo rodillas, se consideran seguros y pueden brindar beneficio para el dolor. En caso de que estos no sean suficientes se puede utilizar cremas con capsaicina, sobre todo en rodillas, teniendo en cuenta que siempre debe haber un buen lavado de manos luego de su aplicación para evitar el contacto con ojos o genitales. Si lo anterior no es suficiente se pueden utilizar medicamentos tomados como antinflamatorios, en la menor dosis y por el menor tiempo, dependiendo del estado de salud de cada persona.

El acetaminofén o paracetamol se considera relativamente seguro pero su efectividad puede ser limitada para el control del dolor y se debe vigilar que no se pase la dosis diaria permitida. Esto es importante ya que debido a las diferentes marcas disponibles en el mercado a veces se pueden consumir dosis muy altas de forma inadvertida. Es fundamental informar al grupo de salud de todos los medicamentos que se estén tomando.

Aún hay controversia sobre el uso de medicamentos como glucosamina, condroitina, entre otros. Desafortunadamente la calidad de la evidencia no permite realizar recomendaciones fuertes a favor o en contra. Algunos pacientes pueden obtener mejoría con estos medicamentos y se debe realizar un manejo basado en decisiones compartidas entre paciente y grupo de salud, teniendo en cuenta que el uso de toda sustancia debe tener vigilancia por el riesgo de efectos adversos o interacciones.

En ocasiones se podrán aplicar esteroides de forma local dentro de la articulación y se puede obtener gran mejoria de forma temporal con los mismos. Se ha utilizado ácido hialurónico con resultados variables, teniendo en cuenta que la aplicación de este no previene la aparición de la osteoartritis, que este no cura la osteoartritis y que al ser un procedimiento invasivo tiene los mismos riesgos que la aplicación de esteroides dentro de la articulación.

Se deben evitar los opioides debido a sus efectos secundarios y el riesgo de adicción con muy pocos beneficios en cuanto al control de la osteoartritis.

En resumen, los mejores resultados los podremos esperar cuando tanto la persona afectada como el equipo de salud funcionan en equipo para realizar cambios en el estilo de vida y la escogencia de la medida de tratamiento que mejor se adapte a las necesidades y condiciones de cada persona.

Enlace recomendado: https://www.reumatologia.online/blog/que-es-la-artrosis